domingo, 12 de septiembre de 2021

La educación no es un juego: es lo que siempre está en juego

Fuente: Museo Nacional de Costa Rica

Irene Vallejo nos llama la atención acerca de esta educación que siempre está en juego . El último informe sobre el estado de la educación en Costa Rica (CONARE, set.2021) habla del deterioro que ha sufrido la educación en este tiempo de pandemia. Y algunas colegas bibliotecarias aprovechan para concluir que la pobreza creciente y el deterioro institucional, mencionados en el informe, son culpa del gobierno PAC. Otras indican que la crisis ha estado en todos los gobiernos.

El problema de la pobreza es enorme para pensar en soluciones globales y, pienso que es desde el ámbito de acción de cada ciudadano como lograremos resolverlo. Es el caso de l@s bibliotecari@s, que hemos dedicado una vida a alfabetizar y acercar la información y el conocimiento a los más pobres, que hemos confiado en que a mayor nivel educativo, mayor bienestar de la población.

No nos hemos detenido a pensar en qué tipo de gobierno dirige al país, o cuál ideología, pues siempre encontramos coincidencia en la necesidad de cerrar las brechas, tanto dentro como fuera de las fronteras. Recuerdo proyectos de bibliotecas escolares, que la OEA impulsó en su momento, y que nos llevaron a alfabetizar la Nicaragua post revolución, o el Caribe Anglófono, las zonas que necesitaban un mayor impulso en el momento.

Me pregunto cuál ha sido el papel de l@s bibliotecari@s escolares durante la pandemia? Cuando el profesorado ha tenido que enfrentarse a los retos de la educación virtual? Qué esfuerzos han hecho para reentrenarse para ofrecer nuevas herramientas y apoyos a un currículo que no se ajustaba ya a las nuevas circunstancias?.

En nuestras lecciones siempre enfatizamos la necesidad de considerar la información como el elemento vital para el desarrollo de la población. Pero ha habido, en esta época de noticias falsas, un mutismo de parte de nuestros Colegios Profesionales y Escuelas de Bibliotecología, con relación a la forma como enfrentamos el problema, y cómo formamos estudiantes con un pensamiento crítico, que los vuelva autónomos e independientes. Pareciera que estos temas no tienen que ver directamente con la eliminación de la pobreza, y las colegas prefieren echarle la culpa al gobierno de turno. Todo lo contrario: La pobreza no es una nube gris que nadie comprende, sino que se compone de múltiples aspectos, uno de los cuales se relaciona con la educación, la alfabetización (digital en el presente) y el manejo de la información.

En un posteo anterior nos referimos a la necesidad de mejorar la conectividad, pero complementada, como se menciona en el Economist  con otras medidas que la hagan efectiva, como el acceso a dispositivos, la disponibilidad de contenidos relevantes y la provisión de apoyo y herramientas a profesores y alumnos. Precisamente a esto último deben estar dedicando toda su atención los bibliotecarios, si desean  integrar eficazmente la tecnología en la práctica docente.

Como menciona el artículo antes citado del Economist, “las escuelas no son solo lugares donde los niños aprenden” sino que son espacios comunitarios en donde la gente acude a votar, o que se convierten en refugios cuando tenemos inundaciones o terremotos. En los últimos tiempos también se han convertido en vacunatorios y lugares donde se instruye en medidas de control sanitario. Quizás nuestros educadores no se han percatado del enorme impacto que las escuelas tienen en la comunidad y cómo su accionar contribuye a eliminar las brechas que nos crea la pobreza. Si las bibliotecas supieran esto, su papel durante la pandemia habría sido más agresivo, ayudando a construir mejores condiciones para el emprendeurismo y la creación de empleos, aparte de la conexión con los servicios sociales ya mencionados. En otros países ya es común que las bibliotecas se conviertan en “maker spaces” especie de talleres donde la gente aprende a alfabetizarse y crear sus pequeños negocios. El estudio del Economist mencionado indica el grado en que la conectividad en las escuelas inside en el aumento del ingreso por per capita de los habitantes. 

Hay mucho que podemos hacer para eliminar la pobreza desde nuestros espacios profesionales: 1) mejorar la conectividad entre lo público y lo privado en nuestras comunidades, 2) mejorar la capacitación de los docentes en las TIC, 3) integrar la alfabetización digital al currículo escolar, 4) Proteger a los niños en línea y ayudar a formar un pensamiento crítico.







 

No hay comentarios: