martes, 19 de febrero de 2013

Cuarenta años de la creación de la Universidad Nacional (IV)



¿Cuál fue el éxito de una Biblioteca que empezó con nada y recibió, en poco tiempo, el apoyo de todas las autoridades universitarias y de la comunidad universitaria en general, para lograr financiamiento para construir un flamante nuevo edificio, una red de información y conocimiento que se extendió fuera de la ciudad de Heredia, para abarcar zonas lejanas del país (Santa Cruz, Pérez Zeledón, Limón) y compartir la nueva experiencia con bibliotecarios centroamericanos y del Caribe? La respuesta está en la forma como nos involucramos de lleno en la construcción de un concepto nuevo de universidad, lo cual implicó gran participación en luchas que se dieron a todo nivel: desde la redacción de un estatuto orgánico, a la elección posterior de directores y decanos, o la búsqueda de mayores recursos, lo cual implicó realizar marchas y organizar movimientos que crearan consciencia en los políticos de la importancia del proyecto nuevo de universidad, comprometida con zonas de poblaciones no atendidas en el pasado.
Para el diseño del nuevo edificio realizamos una investigación que duró un año, junto con el equipo de arquitectos encabezado por Carlos Jankilevich, y que luego fue concluido por la Oficina Ejecutora con los fondos del BID. Un edificio es solo la expresión de un concepto de biblioteca que el equipo de profesoras se encargó de definir: Elia Ma. van Patten, Zaida Sequeira, Alice Miranda, Roxana Castro, Marlene Harper, Hilda Chacón, Ana Pacheco… ellas pusieron la semilla de plantas que crecieron y fueron cuidadas por muchas otras colegas.  Todas ellas asumieron el nuevo concepto de información y conocimiento al servicio del desarrollo. Todas ellas entendieron que la eficiencia se basa en la excelencia, en el conocimiento de las normas internacionales y su aplicación en un contexto de recursos limitados que solo podía acercarse al gran banquete informativo mediante el aprovechamiento de esfuerzos y recursos abiertos ofrecidos por las grandes bibliotecas y repositorios del mundo. Comprendimos que el acceso al conocimiento se realiza mediante redes de colaboración desinteresada que van más allá de las restricciones de derechos de autor, artificialmente impuestas por organismos comerciales.
Muchos acontecimientos sucedieron en estos cuarenta años transcurridos desde el inicio de la UNA, a nivel nacional e internacional, pero la visión inicial fue acertada y preparó a la Biblioteca y a la UNA para adaptarse a todos los cambios que siguieron. Fue un privilegio haber sido parte de este impulso.



lunes, 18 de febrero de 2013

Cuarenta años de la creación de la Universidad Nacional (III)



El Departamento de Bibliotecas Escolares del MEP encontró muy adecuado el entrenamiento que ofrecíamos en la UNA y solicitó nuestra colaboración. Muchos bibliotecarios escolares ingresaron a las aulas y logramos un apoyo de la OEA para impartir cursos y seminarios en Nicaragua y la región del Caribe Anglófono. Fue una época de expansión extraordinaria, con bibliotecarios nicaragüenses, recién comprometidos con campañas de alfabetización (1979 y 1980), quienes vinieron por algunos meses a recibir cursos para bibliotecarios escolares. Era la época en que Elia Ma. Van Patten incluía al bibliotecario escolar como un docente más en las escuelas y colegios, y las bibliotecas se convertían en Centros de Recursos. Ofrecimos un currículo novedoso y renovado que puso a la UNA en el camino de excelencia que hoy posee. Incluyo una imagen tomada en uno de los seminarios, con Elia Ma. y Zaida Sequeira.


Al inicio de los 1980’s se asomaba apenas la gran carretera informacional que fue luego internet, y entonces organizamos del primer Congreso Internacional de la WWW en San José, con la participación de profesionales que vinieron de OCLC, OPS y varios países de Centroamérica y México. Fue una reunión pionera en un campo que emergía y del cual no teníamos idea del éxito futuro. Dejo imágenes de los distintos equipos que trabajamos en la preparación del Congreso y de algunas de las actividades del mismo.












Cuarenta años de la creación de la Universidad Nacional (II)



Miro en retrospectiva aquellos años de 1973, 74, y más con asombro y agradecimiento por la extraordinaria oportunidad que se nos dio de participar en la creación de un concepto nuevo de universidad, comprometida con la comunidad. La Biblioteca que iniciamos entonces partió de casi nada, pero con carta blanca para imprimir un concepto gerencial, que hoy es aceptado, basado en la colaboración de los profesores, directores de unidades, estudiantes y el mismo personal recién reclutado. “Crowdsourcing” se llamaría hoy a esta estrategia de diálogo constantes con todos los interesados en un proyecto. Por eso fue importante conformar grupos de apoyo, Comités de Biblioteca, en las diferentes unidades académicas quienes, al inicio, aportaban sus listas de recursos para poder iniciar la enseñanza. Diseñamos entonces métodos eficientes de compra de libros, revistas y audiovisuales, y sistemas de alerta para informar sobre la llegada de los mismos. Iniciamos sistemas de selección y descarte de materiales donados, y gestionamos el uso del software libre para la catalogación de todos los materiales. Luego de cuarenta años de intentos con el uso de otros tipos de software, finalmente el país está listo para aceptar el software libre en la mayoría de las instituciones educativas del Estado. Algunas bibliotecas universitarias aún no se deciden a probar el software libre, pero es cuestión de tiempo que lo hagan.
Pero la opción más importante que tomamos entonces fue el entrenamiento del personal: jóvenes sin ninguna preparación en bibliotecología para quienes debíamos diseñar un programa comprensivo y actual que le permitiera a la Biblioteca funcionar con eficiencia y de acuerdo con estándares internacionales. Los programas de entrenamiento se iniciaron con charlas semanales en el lugar de trabajo y culminaron con una verdadera carrera universitaria. Este fue el inicio de la capacitación de decenas de empleados que luego formaron parte de la academia universitaria y llegaron a asumir direcciones de unidades y departamentos. Dejo imágenes de aquellas primeras graduaciones.





domingo, 17 de febrero de 2013

Cuarenta años de la creación de la Universidad Nacional Deyanira Sequeira, febrero del 2013.



En 1973 se fundó la Universidad Nacional. Pocos meses después, en 1974, iniciamos la Biblioteca de la UNA que me correspondió dirigir. En la imagen que sigue estoy leyendo el discurso de inauguración en la presencia del entonces presidente de Costa Rica, don Daniel Oduber, y algunos ministros y miembros del Consejo Universitario (Oscar Arias, Rodrigo Zeledón) junto con el Rector Benjamín Núñez. Era el inicio de una era que fue rica en experiencias y que nos involucró en la construcción de un modelo nuevo de universidad: la Universidad Necesaria, lo llamamos.
 Con el Sr. Embajador de los EE.UU y el Padre Royo, a cargo de relaciones públicas en la UNA
Don Rodrigo Zeledón, el Dr. Alfio Piva, don Daniel Oduber, Padre Benjamín Núñez, don Oscar Arias y Deyanira Sequeira, en la inauguración de la Biblioteca de la UNA, 1974.